La Mariposa Luna voló hacia el espacio estrellado.
En su viaje, vio un planeta azul y verde.
Se encontró con un alienígena amigable y juguetón.
Juntos, exploraron estrellas y nebulosas brillantes.
La Mariposa Luna aprendió sobre la importancia de la amistad.
Decidió regresar a su hogar en la Tierra.
Se despidió del alienígena y prometió volver algún día.
La Mariposa Luna aterrizó en un hermoso jardín de flores.
Compartió sus aventuras celestiales con otros insectos.
Todos se sintieron inspirados y soñaron con explorar el universo.